Buena suerte, mala suerte, quien sabe...

Extraña trampa la que nos tendió la realidad. Aplicando cualquier lógica (salvo la K.) lo decidido en el senado es lo correcto.

No toda acción lógica trae como resultado una consecuencia positiva.

En este caso creo que a la luz de los acontecimientos (caras y fantasmas vistos en el acto del campo y reacciones de los ruralistas una vez rechazado el proyecto en el senado que en menos de 24 horas abandonaron la sana actitud de ser uno para volver a ser cuatro) solo nos queda concluir que el único ganador es el PJ, y en menor medida la oposición.

Escribo esto con la profunda esperanza de estar equivocado, pero ¿no te da la sensación que Solá, Saenz, de Duhalde, Rodriguez Saa, Verani y hasta el honorable ex presidente de la Nación Dr. Menem ahora parece poco menos que paladines de la justicia, la cordura y la transparencia?

Pregunto, ¿no son los mismos nombres que ya estaban antes?, ¿no son los mismo...?

Yo solo veo proselitismo en todo esto. A la cabeza está Carrió, diciendo que se han cumplido sus profecías, que ella aviso que en Julio íbamos a volver a nacer, además no dudó en arrogarse el triunfo “Yo dije si se sale a la calle se gana”, “entonces hable con De Angeli para organizar el acto del martes”.

Mientras escribo la escucho agregar “Esto es pura paradoja, por eso es que nadie entiende” mientras deja flotando un “solo yo entiendo”, yo me siento tratado como un idiota... ¿Por qué Dios habla solo con ella?, seguro estoy de que Él le ha dicho que no sea soberbia ¿por qué no le hace caso?

Era nuestra oportunidad, el país podía costear el mega choque de la política, lamento que Kirchner solo se haya llevado puesto a si mismo y a los suyos, de haber logrado locura parlamentaria también hubiera terminado arrastrando a muchos más.

Tengo miedo, me da escalofríos solo pensar que todo vuelve a la “normalidad”, que los miles que nos movilizamos en estos meses volvamos a nuestro ostracismo y nuevamente abandonemos lo público diciendo “yo ya cumplí, estuve en Rosario y en Palermo, ahora que alguien se hagan cargo”. POR DIOS… ELLOS… ELLOS son los que nos trajeron hasta aquí!, ¿por qué ahora creemos que nos van a llevar en alguna otra dirección?.

Solo queda recordar que esta historia es solo otro volumen de la biblioteca infinita, ya llegará el momento de leer las mismas páginas con un ordenamiento más feliz de sus palabras.

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